.jpg)
Una simbiosis perfecta entre nostalgia y compañía, tanto que compartir y a la misma vez, tan poco que contar.
Fijaste tu mirada en sus ojos, tan felinos como los tuyos, no por lo rasgado, sino mas bien por el entrecerrado cansado que los caracterizaba. Maullaste, intentando captar una atención que estaba a millas de la que tú requerías en ese momento, pero pacientemente aguardaste tu turno en sus pensamientos.
Trish
Primera Parte
Segunda Parte
5 Mordiscos:
Que gato negro más bonito :)
Siempre hay que sabes esperar! seguro que pronto le llegará su turno!
Bss
Muy bueno, la verdad esque los gatos negros son tan interesantes como muchas personas. Siempre están ahí, a tu lado, fielmente, pero sin embargo reservados hasta un punto que da una gran intriga, siempre ocultan algo y no muestran todos sus sentimientos ^^.
esta bueno =)
me gusta tu blog =) un abrazo gigante
Yo alguna vez, también fui un gato negro.
Publicar un comentario